(By Nosoloángel y Nosolodoctor)
¿Saben que contestaría un astrónomo a la pregunta de qué se ve con exactitud en el firmamento de una noche estrellada? Pues respondería que lo que vemos es “el pasado”, un pasado sepultado por millones de años luz. Y además añadiría que la distancia entre los astros es inconmensurable… Donde cualquier enamorado ve un bello cielo tachonado de purpurina apretujada y parpadeante, otros observan un distante cementerio estelar… Pequeñas estrellas recién nacidas, quizá con solo un millón de años luz de vida, palpitan “sepultadas” entre luces de incandescencia inerte…
Vainica Doble canta una Nana a una de ellas. La letra es una preciosidad y por eso extraemos un pedacito:
Tu madre te va a regalar, mi amor,
tres planetas muy redonditos,
que van a bailar a tu alrededor, mi amor
pero has de tener cuidadito.
No te debes acercar, no les vayas a asustar, ea….
Y lo que es más los podrías chamuscar…
No te apartes de la Via Láctea, mi amor,
mi pequeña estrellita preciosa,
que puedes caer, por error, mi amor,
en alguna mortal nebulosa…
Y lo que sería fatal de pensarlo siento horror,
que te extraviaras, ay Señor, en una nube de polvo sideral…
Muy acertadamente el profesor David P. Barash (psicólogo) afirma que nuestros órganos sensoriales no son mensajeros fidedignos, pues todos nosotros somos “esclavos de paradigmas mentales”, de “sistemas de creencias” y, por lo tanto, sólo hasta que estamos preparados NO podemos ver de verdad.
Los astrónomos hacen acopio de macro telescopios, pero nosotros sólo contamos con un anciano cerebro, que a veces parece estar desenchufado, para poder distinguir en la inmensidad de la realidad “estrellitas sepultadas” de las estrellas falsamente titilantes…
Barash aconseja, inclusive, que “creamos en lo que no vemos” y que nos fiemos de nuestro cerebro si este hace acopio de humildad y decide trabajar mano a mano con la voluntad para revelar lo oculto.
¿Os apetece hacer un poco de autostop galáctico… por nuestra galaxia terráquea?, ¿¡a ver si encontramos algún tesoro….!?
Por ejemplo, si hablamos del maremágnum de conocimiento generado en internet se podría afirmar que vivimos en la sociedad de la información, pero el conocimiento de calidad, “la sabiduría”, es un bien muy, pero que muy escaso en la red y son muy pocos los oasis en ella destinados a este fin.
Viajemos ahora hacia otra lejana estrella, en este caso, hablemos de “la música como creación”, la cual está más viva y efervescente que nunca pero igualmente sepultada por la cantera de cantantes OT, cuya finalidad ha sido engrosar las filas de actores en los musicales de La Gran Vía, sin olvidarnos de la nueva revista de variedades, abanderada por estrellas del pop disfrazadas de vedettes … Toda este “refulgente” firmamento musical oculta “verdaderas estrellas” que realizan impecables composiciones de factura excelente como la que os mostramos a continuación… Por favor, sopesen si ustedes creen que la artista en cuestión, Yael Naim, llenaría algún teatro de este santo país en la actualidad.
Debería llenar, pero por el momento es impensable….
Así pues, sólo creemos en lo que mejor se ve, en lo que destaca, en lo que brilla. Los colaboradores de la Wikipedia, las personas que traducen las canciones de los vídeos que les ofrecemos, las que cortan pequeños metrajes de cine para hacernos llegar la pieza clave de una película que nosotros incrustamos en una entrada, las que opinan desde el anonimato diariamente revitalizando con sus comentarios los blogs que visitan… “existen” aunque no lo parezca a simple vista.
Afinando aún más, si observamos agudizando la atención, nos percataremos de que hay algo mucho más extremadamente difícil de captar, incluso para nuestro corazón, y son las acciones, gestos, palabras o sucesos imperceptibles y aislados que por separado podrían caer en la nada, pero que accionados al mismo tiempo y dirigidos con una intención sincera hacia un mismo fin, hacen que nuestro mundo sea mejor, lo iluminan… Harán posible “un futuro”, piénsese en los arreglos musicales de una composición…, estos culminan en una canción, recordemos los aprendizajes que vamos recolectando durante toda nuestra vida, culminarán en nuestra mejor versión, o las infinitas pinceladas o retoques para pintar un cuadro…etc
Existe una sinfonía de la que no tenemos constancia, somos las notas de una partitura de la que no somos conscientes. “Nada es prescindible”. Pero es necesario “posicionarse”. El cero Sí suma cuando se coloca a la derecha. Ahí siempre suma, e incluso multiplica por 10…
El que no creyó, que fue un escéptico hasta el final.
El que aseguró que eso no podía existir, autopista elevadas, le llevaran lejos de aquí.
Ella que jamás se interesó en medir la actividad.
Que le daba igual cara que cruz, ciento que mil.
Autopistas elevadas le llevaran lejos de aquí.
A los demás todo les pasa, a los demás.
¿Por qué no a mi si esto es para lo que yo nací?.
Yo que me esforcé, que dediqué mi vida a investigar.
Me documenté y desde el principio creí.
Autopistas elevadas, me dejaran por siempre aquí.
Autopistas elevadas me dejarán naufrago aquí.
Una frase emotiva, un párrafo de un libro, cualquier detalle que aportes pueden que hagan que el firmamento de este blog sea una de las más bellas visiones jamás imaginadas. Puedes colaborar en: nosolodoctorylac@gmail.com.